

Distribución en Alta
Hasta que el agua de la planta potabilizadora llega a los hogares pasa por dos fases en la que entra en juego una importante red de distribución respaldada por una tecnología de última generación que asegura un servicio de máxima calidad.
Una vez que la planta potabilizadora ha tratado el agua para hacerla apta para consumo humano, sólo queda llevarla hasta la población, una tarea que se realiza en tres fases:
Aducción
Esta actividad consiste en el transporte del agua desde la planta potabilizadora hasta la entrada de las poblaciones mediante una red arterial de tuberías de gran diámetro y complejos sistemas de bombeo. El proceso de potabilización no tiene lugar necesariamente cerca de la ciudad o población abastecida, lo que hace que tenga que ser bombeada a través de grandes tuberías (de 800-1.600 mm) hasta llegar a su destino.
Red de Distribución
Ya en la población, el agua se distribuye a través de un entramado de tuberías de distinto tamaño o diámetro (450-800 mm diámetro), de manera a cada punto de suministro le llegue la presión acordada y en la cantidad necesaria.
Gestión Integral mediante telemando integrado
En esta fase, Aigües de Catalunya controla que el caudal de agua que llega al municipio, la presión y el posicionamiento de las válvulas sea el correcto al tiempo que se asegura del buen funcionamiento de pozos y rebombeos.
A lo largo de la red hay elementos de control, de seguridad, de desinfección y de impulsión que garantizan de forma activa la mejor distribución del agua.